En la actualidad trabaja como Técnico de Atria de frutales en ACOPAEX, sociedad cooperativa que agrupa a más de 2000 agricultores de Extremadura.
1. ¿Por qué elegiste estudiar ITA?
Decidí estudiar Ingeniería Técnica Agrícola por varias razones: la vinculación familiar al mundo agrario, el deseo de seguir adquiriendo los conocimientos científicos y técnicos necesarios para el desarrollo de una labor en empresas agrícolas y/o ganaderas después de realizar el ciclo de Gestión y Organización de Empresas Agropecuarias, las buenas perspectivas laborales tanto a nivel regional como nacional al ser nuestra nación un país donde el sector agrícola y la industria alimentaria tienen una gran relevancia y, por último, y no menos importante, otro de los motivos por los que decidí estudiar ITA fue la alta flexibilidad de los ingenieros para desarrollar diferentes funciones.
2.- ¿Porqué elegiste el Centro Universitario Santa Ana?
Las buenas referencias de conocidos que estudiaban en Santa Ana, un trato más cercano entre compañeros y profesores y las enseñanzas prácticas, son las razones que inclinaron la balanza para matricularme en la Escuela de Almendralejo.
3.- ¿Cuáles fueron tus inicios profesionales y cúal es tu actividad actual?
Desde el principio mi carrera profesional ha estado ligada a ACOPAEX aunque siempre he trabajado en la explotación agraria familiar. Dentro de la cooperativa mi labor es el control y asesoramiento a los agricultores socios a través de visitas, inspecciones, auditorías y acciones formativas, para conseguir un fruto con calidad que cumpla los requisitos legales, en especial los relacionados con las materias activas utilizadas, ya que la Seguridad Alimentaria prima por encima de cualquier otro criterio en el mercado actual.
4. De tu paso por la Escuela de ITA, ¿qué cosas destacarías?
El trato cercano entre alumnos y profesores y, sobre todo, la adquisición de conocimientos ejemplificados con actividades cotidianas de nuestro entorno que, desde mi punto de vista, hace entenderlos, adquirirlos y conservarlos mejor. Podría describir en tres palabras lo que ha significado mi paso por Santa Ana: PROFESIONALIDAD, CRECIMIENTO y EVOLUCIÓN.
5. ¿Qué aspectos has necesitado durante tu ejercicio profesional que no formaran parte del plan de estudios de ITA?
El reconocimiento de plagas y enfermedades referentes a frutales de hueso y pepita, aprendizaje y prácticas de trámites de subvenciones en general, como pueden ser las ayudas agroambientales, así como el estudio en profundidad de normativas de calidad que afectan a la producción de frutas de hueso y pepita.
6. ¿Qué consejos les darías a los futuros egresados?
Mi recomendación es que intenten exprimir al máximo las clases, que intenten adquirir el máximo de conocimientos que la Universidad les pueda ofrecer porque una buena preparación es lo que te transforma como profesional. La visión de trabajo y capacidad de análisis tras su paso por el Centro evolucionará de forma notable y lo verán más tarde en la relación con su entorno laboral.
Creo que la Escuela ofrece una preparación óptima para abrir camino en una situación tan complicada como la actual.